Los candidatos en Enade 2005

Fue la última oportunidad en que los candidatos pudieron estar juntos y dejar en claro sus diferencias. Este tradicional encuentro empresarial los reunió para conocer sus posturas en temas de política económica y todos los aprovecharon a su manera.

En CasaPiedra estaba reunido lo más granado del empresariado chileno, muy atento a las ponencias de las autoridades económicas nacionales y a los candidatos.

El Ministro Eyzaguirre, en su particular estilo, les enrostró a los empresarios que pedir intervenciones en el mercado del dólar es echarnos encima una crisis y que los impuestos a la renta podrían bajar si se pagaran todos los impuestos, dando ejemplos concretos de elusión y quizás evasión de impuestos en los tramos más altos del impuesto global complementario.

En tanto los candidatos, cada cual con ironías de mejor o peor gusto, dieron su visión del modelo económico -tema central de la reunión de este año, junto con la innovación, la apertura internacional, el empleo, el rol del Estado y la educación- las que no muestran grandes diferencias en las tres candidaturas más importantes.

Por su parte, Tomás Hirsch, el candidato del pacto Juntos Podemos Más, aprovechó de criticar a los empresarios y a los candidatos derechistas por el trato dado a los trabajadores, los que son, a su juicio, los que verdaderamente sudan la gota gorda, enriqueciendo con su trabajo a los dueños de empresas y perpetuando la grave desigualdad del ingreso debido a los bajos sueldos que obtienen.

En síntesis, nada nuevo en esta ultima oportunidad de confrontar ideas, mucho guante blanco entre los principales candidatos y guiños entre los representantes de la Alianza para la casi segura segubda vuelta.

Un poco de cordura

Recientemente he leído las declaraciones de Jorge Schaulsohn -director de la campaña parlamentaria del PPD y destacado abogado y político que protagonizó el hecho más inverosímil de la política nacional en mucho tiempo al proclamarse Alcalde electo de Santiago en las últimas municipales y no serlo finalmente- respecto de la polémica suscitada por el carácter de empresario (y millonario) del candidato de RN Sebastián Piñera. Creo que es el personaje más importante de la Concertación que ha puesto un poco de cordura en este asunto al manifestar que no ve impedimento ni conflicto de interés que un empresario millonario postule a la Presidencia, poniendo de manifiesto por otra parte que estos ataques concertacionistas -a los que se ha unido miserablemente la UDI- no son más que ataques personales por el alza sostenida que ha tenido el candidato RN.

Ciertamente que Schaulsohn -que fue también diputado- es un hombre exitoso, empresario igualmente que Piñera, sin alcanzar su fortuna por supuesto. Pero al menos no cae en una crítica fácil y sin mayor sentido y, lo que es más importante, sin caer en nuestro famoso y enquistado doble estándar, del que son maestros los políticos chilenos. Mal podría criticar Schaulsohn a Piñera por condiciones que comparte con él.

Como conversaba recién en el almuerzo, los políticos creen -y algo de razón deben de tener- que el electorado es tonto y por lo mismo justifican la ausencia de ideas en el debate político, quedándose sólo con la cosa banal y burda para criticar y sin poner en la mesa temas de fondo. A esto ha contribuido mucho la forma de hacer política del candidato UDI, al decir que a él le interesan los problemas de la gente y que ésta vota por personas, dejando de lado el aspecto ideológico fundamental en que se deben de basar todas las candidaturas.

Incongruencias de nuestra clase política

Ahora resulta que Piñera deberá vender sus acciones para dejar tranquilo a sus detractores y poder postular -sí, sólo postular- a la presidencia de la Nación. ¿Por qué no hicieron (o hacen) lo mismo los Ministros y parlamentarios que tienen intereses en diversas empresas y sociedades? Aún más serio es el caso de estos últimos, que pueden tener conflictos de intereses en su tarea legislativa (recordemos las denuncias contra Zaldívar por su participación en algunas pesqueras y su no inhabilitación en los proyectos de ley sobre esa materia).

Me parece francamente absurdo este juego. Por muy estudiado que esté como estrategia electoral me desagrada que los Ministros entren en él. Que Eyzaguirre hable de conflicto de interés por la posible llegada de un empresario a la Moneda no resiste análisis.

Las críticas que deslizó Bachelet a Piñera no parecen ser muy consistentes (criticó su bajada como precandidato presidencial en el año 1999 y también de "trasvestismo político" por acercarse a la DC), no así las que éste realizó sobre las gestión como Ministra de Estado de la candidata oficialista, las que -podemos o no estar de acuerdo- apuntan a su capacidad para asumir esta importante tarea. Creo que la única que va a perder en este juego es Michelle Bachelet y cada vez veo con más nubarrones el horizonte político de esta candidata. Sólo espero que las elecciones lleguen luego para evitar que siga cayendo y pueda enmendar el rumbo en la segunda vuelta.

Más mezquinos que generosos

Desde que tengo recuerdos de las campañas políticas (parlamentarias y presidenciales) me ha llamado la atención la mezquindad de la mayoría de los candidatos -con contadas excepciones- que basan mucho su campaña en desprestigiar la de su contendor directo, fenómeno que no es sólo nuestro por supuesto, pero que igualmente es indeseado.

Las ansias de poder, de pertenecer a las élites políticas del país y, no menos motivante, de pasar a la historia (ya sea como diputado, senador o presidente) hacen aparecer en nuestros candidatos los más bajos sentimientos y las más maqueavélicas intrigas para intentar ganar la elección, sin tener los más mínimos escrúpulos en ventilar hechos y/o actos que los puedan favorecer.

Todo esto a propósito de los contínuos ataques que se están dirigiendo los candidatos a la presidencia, los que cada vez están subiendo más de todo, desprestigiando, desde mi punto de vista, a la clase política toda. No creo en que una estrategia basada en ataques rinda dividendos, al contrario, resta credibilidad a todos. Me gustan las candidaturas que demuestran un especial interés por encantar, con ideas, con ilusiones, con esperanzas y no las que nos muestran resentimientos, odiosidades y tratan de crecer resaltando que son menos malos que los otros.

¿Dónde quedaron las virtudes de "servidores públicos" que pregonaron los diputados/senadores que van a la relección? ¿Nos pueden mostrar un mínimo siquiera de sus promesas cumplidas? Claramente, todos entramos en este juego. Sabemos que nos prometen imposibles (ellos más que nosotros lo saben) pero que más da; hay que votar, hay que decidirse por uno. Mejor sería votar por don Nulo o don Blanco para darles un remezón fuerte y hacerles entender que deben cambiar su forma de hacer política.

La mayoría de nuestros jóvenes así lo han dado a entender no inscribiéndose en los registros electorales, una situación que se mantiene hace muchos años pero no ha logrado hacer pensar a nuestra clase política.

Ataques por la franja política

El viernes se pudo ver por la franja política el primer ataque directo a las campañas presidenciales -la DC cuestionando a través de una caricatura la condición de empresario de Piñera- lo que me parece puede marcar un camino equivocado. Esta franja política está concebida para dar a conocer las ideas de los candidatos, que sea propositiva y edificante, que los candidatos puedan hacer la diferencia mostrando sus proyectos de trabajo, etc., pero no veo que su función esté en atacar al contrario tan burdamente.

Está claro que hay que dar a conocer las diferencias, pero alegar que un candidato sea empresario es casi ridículo, ya que la mayoría de los políticos comparten intereses económicos y muchos son también empresarios. ¿El problema será ser exitoso, entonces?

No creo que sea la forma. Piñera tiene algunas debilidades como candidato (cierta arrogancia, poca credibilidad en sectores populares y en las mujeres, un pasado que es mejor olvidar -el olvidado Piñeragate con Evelyn Matthei- y otras que deben ser destacadas con mayor responsabilidad) y claramente está tentando al centro político -de ahí el temor DC- pero este camino me parece que puede ser contraproducente y el comando de ese candidato así lo ha visto tratando de sacarle provecho político.

Tiembla la Concertación

Luego de las últimas encuestas publicadas (El Mercurio-Opina dada a conocer el domingo y CEP entregada ayer martes) ya no parece tan claro el triunfo de Michelle Bachelet y se aleja casi definitivamente la opción de ganar en primera vuelta.

Que la derecha obtenga más preferencias que la concertación (43% sobre 39%), y más aún, que la Concertación con los votos de Hirsch -suma sólo 42%- aún quede bajo los candidatos de la Alianza es muy preocupante de cara a una segunda vuelta y nos demuestra que la gente ha perdido parte de la confianza que depositaba en Bachelet y por otra parte nos muestra que la candidata oficialista es definitivamente débil, como ya lo advertí hace mucho tiempo en estos mismos comentarios.

Según Ricardo Lagos, debe trabajar mucho aún, claro está, pero también debe trabajar toda la Concertación para evitar el escape de votantes hacia Sebastián Piñera, que se perfila claramente como el adversario de Michelle en la segunda vuelta (llamada por los snob de siempre, que tanto abundan en este país, "balotage").

Creo que más que un toque de alerta, estos resultados suponen un verdadero terremoto, que deben hacer pensar al comando de la canditada oficialista en que no basta con igualar los ofertones de la derecha, sino que deben pensar en reencantar al electorado con propuestas concretas pero reales y no esquivar el debate, agregándole ideas y creatividad a la campaña, que es lo que más se extraña últimamente.

La franja política

Estos días he tenido la oportunidad de ver la franja política, la parlamentaria más que la presidencial, y no me han dejado una buena impresión.

En primer lugar, en mi carácter de no experto en la materia, estimo que las propuestas audiovisuales no han sido muy ingeniosas -más bien pobres- y no se ve un avance desde la anterior franja política. La creatividad pasó de lejos en casi todos los comandos: se repiten las imagenes -como sacadas del mismo saco- de gente muy humilde la más de las veces y de huasos y mapuches en sus trajes típicos.

Ahora bien, en cuanto a los contenidos, que debería ser la parte central de estas campañas televisivas, todas -con la salvedad de la del pacto Juntos Podemos más- repiten y repiten o, más bien, prometen y prometen lo mismo.

Me indigna escuchar a todos los candidatos de la Concertación que ahora sí trabajarán por resolver todos los problemas (parecen candidatos de opisición, pues para ellos está todo malo, olvidándose que han sido gobierno durante 16 años, pero ahora sí debemos creerles que cumplirán lo que prometen). Coinciden en todos los diagnósticos con la derecha, lo que asoma más como una estrategia política de no diferenciación para restarle fuerzas a la oposición.

Me indigna tanto como escuchar a los candidatos UDI decir que se la jugarán por los más pobres. Pura demagogia. Su eslogan debiera cambiar de UDI Popular a UDI Populista, dando un toque de realidad y sinceridad política a sus propuestas.

Como no todo puede ser tan malo, me parece interesante el aporte de Renovación Nacional de presentar una idea central en boca de todos los candidatos. Para los televidentes más comprometidos y atentos con los contenidos, esta es la única instancia en que se puede evaluar una idea central de los partidos políticos.

Ahora sí

Desde hoy, 11 de noviembre, empieza legalmente la propaganda electoral para nuestras elecciones presidenciales y legislativas del próximo 11 de diciembre. Desde hoy entonces veremos aun más inundadas nuestras ciudades con afiches de los candidadtos, ahora sí con una gran salvedad: podrán decir "vote por mí" ya que antes de este día para eludir la ley todos los comandos no incluían ninguna alusión directa en el afiche respectivo a votar por el candidato mostrado y se limitaban a mostrar a éste sonriente y con sus frases de apoyo más conocidas. Y de esto me pude dar cuenta cerca de la medianoche de ayer, cuando regresaba a mi hogar, pues la Alameda, nuestra principal vía santiaguina, estaba tapizada de afiches, con un claro predominio de los candidatos de la Alianza.

También desde hoy debuta la "franja electoral" en nuestra TV, amén de propaganda radial directa de apoyo a las candidaturas, pues aunque ya la había, su tono era más solapado para burlar la ley. Es paradógico que nuestros legisladores, quienes tienen un mandato popular para legislar, sean tan caraduras en infringir las leyes, sus propias leyes. Pero bueno, así es Chile.

Respecto de esta franja electoral, que tiene un fin informativo dada la penetración de la TV en nuestro país, hay situaciones que no se entienden: está concebida para que todos los candidatos tengan acceso a ella y puedan dar a conocerse al país, dado su carácter gratuito y en primera aproximación democrático, pero sucede que se vincula el tiempo de aparación de los partidos según la última elección, llegándose a extremos francamente ridículos de conceder 1 y 2 segundos a partidos y pactos regionales y a candidatos independientes, lo que atenta sin duda con el espíritu de esta franja.

Desde mi opinión, el tiempo concedido a cada fuerza política debería ser igual y que ésta lo administrara como mejor le parezca. El sistema actual guarda una gran similitud con el sistema electoral binominal imperante -donde son importantes sólo la Concertación y la Alianza- ya que a estos megapactos le asigna prácticamente todo el tiempo, sin dar cabida a otras corrientes políticas.

Todo mal

Mi hijo mayor me comentaba hace unos días que todo se hace mal en Chile y me dio varios ejemplos. Me quedó dando vueltas esa crítica, propia de nuestra juventud tan desencantada de muchas cosas y de la actividad política fundamentalmente.

Y no deja de tener razón. Ejemplos abundan: la no detención de Fujimori en el mismo aeropuerto (¿cómo pudo entrar? ¿Bin Laden también podría ingresar sin problemas a Chile?); la nueva pista del aeropuerto (mal hecha y a un costo de 50 millones de dólares); la reparación de la Alameda; el tristemente célebre puente de Loncomilla; el plan transantiago (deficiente a todas luces, falta de planificación y previsión) y un largo etcétera.

¿Por qué pasa esto? ¿Pasará lo mismo en otros países? ¿Dónde está la falla? Surgen muchas preguntas y siempre estamos faltos de respuestas. Que los recursos son limitados, estamos de acuerdo, pero eso no quita que se hagan bien las cosas. Que los organismos fiscalizadores no cumplen bien su papel, también puede ser. Que exista cierta corrupción en la adjudicación de contratos para favorecer a ciertas empresas en desmedro de otras con quizás mejores condiciones técnicas, ciertamente algo de eso también debe haber.

Pero igualmente es preocupante que las cosas no salgan como debiera. Al parecer somos simples maestros chasquillas (sin menospreciar a éstos) que "sacamos la pega" sin importar la calidad de la misma.

Entrevistas a candidatos presidenciales

El noticiario de Televisión Nacional de Chile, en su sección Entrevista del Domingo, conducida por el periodista Mauricio Bustamante, está llevando a cabo sendas entrevistas a los cuatro candidatos presidenciales. El formato de esta entrevista -bien llevada en general por Bustamante, aunque fue más duro con Hirsch y algo condescendiente con Piñera, los dos primeros entrevistados- no permite conocer mucho de lo que pretenden hacer estos candidatos, ya que sólo cuentan con 10 minutos para toda la entrevista, pero sí nos entrega una visión de la capacidad del candidato, de su inteligencia, de su manejo ante la presión que pone Bustamante en sus preguntas, directas, contingentes.

Así, por ejemplo, le preguntó ayer a Piñera que haría como Presidente ante la sorpresiva llegada de Fujimori al país. Y este candidato salió bien parado al dejar en claro que se necesitaba una orden judicial para actuar, lo que ocurrió en la madrugada cuando se resolvió la detención de Fujimori y la tramitación de su eventual extradición.

En general, Piñera estuvo bien, algo sobreactuado en cuanto a mostrar sus condiciones ideales -según él- para ser presidente. Criticó abiertamente a Lavín y Bachelet por su actuación errática en relación con el problema limítrofe con Perú y también al gobierno de Ricardo Lagos, reconociendo que ha tenidomuchos logros. Para quien no vio esta entrevista, se puede ver el video en el siguiente enlace, así como el de Tomás Hirsch, entrevistado el domingo anterior.

En las semanas siguientes se sentarán frente a Bustamante y respondiendo a buena parte del país los otros dos candidatos a la presidencia, Joaquín Lavín y Michelle Bachelet, aunque desconozco el orden en que aparecerán.

Conflicto por límites marítimos

Ayer el Congreso peruano aprobó por unanimidad una ley que modifica los límites marítimos con nuestro país -la que fue inmediatamente promulgada por el Presidente Toledo- que puede llevar a tensionar una relación bilateral que se mantenía en buenos términos.

Las aristas de este problema son muchos -intereses económicos, sin duda, problemas internos peruanos que se ocultan con esta acción, también- aunque la prudencia indica que se debe actuar con inteligencia y no profundizar un conflicto que desde mi punto de vista es artificial.

No cabe duda que las cuestiones de límites son delicadas, pero deben ajustarse al derecho internacional y no es aceptable ni válido el cambio unilateral de éstos. Por lo mismo, el alcance de esa ley no tiene más que efectos locales (que pueden ser igualmente perniciosos para la relación chilena peruana ya que para ellos es obligatoria y los futuros gobiernos heredarán un conflicto por la obligatoriedad de dicha ley) y no puede afectar a Chile que, conforme añ derecho internacional, hace respetar los tratados de los años 1952 y 1954 sobre la materia y que fijaron el límite marítimo en el que hasta ayer separaba el mar chileno del peruano.

El punto sensible está en que las autoridades peruanas, en un futuro cercano, pueden actuar de acuerdo con su nueva ley y hostilizar e incluso detener a pesqueros nacionales aduciendo que violaban sus aguas territoriales, creando un verdadero conflicto internacional con insospechadas consecuencias. Esto hay que evitarlo a toda costa.

Espero que se resuelva pronto esta delicada situación, por la vía diplomática, y que no se agrande un problema de índole jurídica pasando a un conflicto político que puede desestabilizar la región.

Pronósticos electorales

Estamos a poco más de un mes de las elecciones presidenciales y parlamentarias en Chile y ya es hora de hacer algunos pronósticos. Basta de encuestas arregladas por los comandos; lo que vale ahora es jugársela por un resultado.

Desde mi punto de vista -aparte de la elección presidencial que promete estar muy buena- hay ciertas disputas por cupos senatoriales que son muy entretenidas y donde se auguran llegadas muy estrechas.

En Santiago hay dos muy significativas: la pelea por el cupo de la Concertación en la circunscripción Santiago Poniente entre Girardi y Zaldívar y la disputa entre Longueira y Lily Pérez, por la circunscripción Oriente, en el cupo "reservado" para la Alianza. Asimismo, también es interesante -y de vital importancia para las luchas de poder internas entre esos partidos- la elección en la Sexta Región entre Letelier y Pérez, de los partidos socialista y PPD, respectivamente.

Las elecciones de senadores en las otras circunscripciones tienen menos incógnitas que resolver. Hay candidatos más fuertes en cada uno de los pactos que asegura la elección tranquila de ellos, repartiéndose equitativamente los cupos entre Alianza y Concertación.

Así entonces, haré mis primeros pronósticos respecto de estos cuatro eventos estelares (la presidencial y las tres elecciones senatoriales antes descritas) esperando que los amables lectores de estas líneas dejen sus pronósticos en los comentarios:

Elección presidencial: Bachelet: 43,3%; Piñera: 19,7%; Lavín: 18,5% y Hirsch: 9,7%; Nulos y blancos: 8,8%. En consecuencia, habrá segunda vuelta entre Bachelet y Piñera.

Santiago poniente: Sin dar cifras, creo que saldrán electos Girardi, con la primera mayoría, y Novoa, que aunque tendrá menos votación que Andrés Zaldívar, saldrá electo por el cuestionable sistema binominal. No creo que alcance para el doblaje, pero se estará más cerca que nunca.

Santiago Oriente: Lejos, la primera mayoría será para Soledad Alvear, seguida de Lily Pérez, que aventajará a Longueira por al menos 3% puntos porcentuales.

Sexta Región: Mi impresión es que gana Letelier, en una llegada muy estrecha. El otro candidato electo será Andrés Chadwick, de la UDI. De un posible doblaje de la Concertación ni hablar.

Los invito entonces a dejar sus pronósticos electorales.