El fin de año siempre es especial. Nos pilla en un estado de ansiedad tal que deseamos que llegue pronto para dejar atrás un 2011 muy agitado y estresante, como si mágicamente todo cambiara y no hubiere un continuo que nos obliga a seguir adelante.
Tiene su explicación, claro está. La promesa de unas vacaciones que asoman como salvadoras, el efecto anestesiante que significa cambiar año, folio, etc. Por eso es que la gente expresa sus buenos deseos, es su propia apuesta de que todo será mejor, de que todo será posible (entre ello, bajar de peso, ir al gimnasio, dejar de fumar y un largo etcétera).
Pero bueno, así es la vida. ¿Y qué nos ha dejado este año 2011 que se marcha con tanta prisa?
A nivel personal, ha sido un muy buen año, con hitos laborales y familiares importantes. Mucho trabajo eso sí. Con niveles de agotamiento que hace tiempo no sentía (los años pesan y pasan, me podrán decir).
He trabajado en temas que me gustan, he publicado 4 libros (tenía en carpeta más, pero ya saldrán el 2012), he emprendido varios proyectos interesantes y tengo otros que verán la luz el próximo año. Es decir, un buen año, lleno de actividades y logros.
A nivel macro, también pasaron cosas importantes. El país tuvo un año complejo. Más bien, el Gobierno tuvo un año complejo. Los estudiantes y sus movilizaciones coparon buena parte del año, en que vimos nacer a varias figuras promisorias, encabezadas por Camila Vallejo, una joven llamada a liderar el mundo político del mañana.
El Gobierno no ha sabido responder a las demandas estudiantiles, tanto es así que tres ministros han pasado por la cartera de Educación, incluyendo al recientemente nombrado Harald Beyer, economista e ideólogo del mercantilismo en la educación chilena.
Termina el 2011 con muy malas cifras para el Gobierno y para el Presidente, en especial, con un magro apoyo del 23%. Realmente malo y malo para todos, pues estas cifras de cierto modo copan las agendas gubernamentales, enfocándose en lo urgente y no en lo importante, que es que a Chile le vaya bien.
Sólo queda desearles a todos un excelente año 2012, lleno de alegrías y éxitos.