sábado, 30 de diciembre de 2006

¿Qué nos dejó el 2006?

Estamos ad portas del nuevo año y como siempre sucede en esta fecha aparecen en todos los medios periodísticos y, en general, en cuanto programa radial o de TV que se precie de informar, los infaltables balances o recuentos de lo mejor o lo peor del año que se va, de esto o de aquello, de política o de deporte, de la Presidenta o del cine, en fin, de todo lo imaginable, cómo si nos interesara a todos recordar este año para siempre y tuviéramos que recurrir a otros para decirnos qué fue lo realmente importante del año que se va.
Luego de esta crítica prescindible, prefiero que mi memoria me engañe a mi nomás y que fije los recuerdos y hechos que a continuación expongo como los más relevantes del año.
En el ámbito político, tres hechos creo que marcarán este año a fuego: la llegada de Michelle Bachelet a la Presidencia de la República; los problemas de corrupción en el país y las denuncias sobre el mismo tema de personeros de la Concertación que finalizaron con la expulsión del PPD de Jorge Schaulsohn, y la muerte del ex dictador Augusto Pinochet (aún no he querido escribir sobre el particular, pero ya lo haré, falta madurar algunas ideas).
Ciertamente, el 2006 será recordado por la muerte de Pinochet, un acontecimiento mundial, largamente esperado.
En el ámbito deportivo, este año será recordado como el año de Colo Colo, a pesar de haber perdido la Copa Sudamericana. El haber obtenido los dos torneos nacionales y tener el privilegio de contar con Matías Fernández (elegido el Mejor Jugador de América del año por la tradicional encuesta que realiza un diario uruguayó, galardón que ya ganaron antes Elías Figueroa y Marcelo Salas, pero no jungando en Chile) hará inolvidable este año para el cacique. ¡Grande Colo Colo!
También merece destacarse, en lo que debe ser considerado el principal logro deportivo nacional de este año, el Mundial de Hockey patín ganado por nuestras "marcianas", torneo jugado en nuestro país (y no en España como dijo el presidente de la Cámara de Diputados, en el chascarro más grande del año) con la presencia de todas las potencias mundiales de la especialidad, lo que le otorga un gran mérito a esa verdadera hazaña. Debió ganar el premio de la crítica deportiva especializada, pero se impuso la "Matimanía".
Asimismo, la campaña de Fernando González no puede quedar fuera de lo mejor de esta año. Un mérito de nuestro mejor tenista que siembra grandes esperanzas para la temporada que empieza mañana en Adelaida.
El los ámbitos social y económico, no hay mucho de que vanagloriarse. La economía creció muy por debajo de las estimaciones oficiales; las expectativas eran altas para el 2006, ayudadas por condiciones externas extremadamente favorables, pero algo pasó que la economía nacional se desaceleró. ¿Falta de liderazgo y conducción? Quien sabe. Es necesario que la inversión se reactive y ahí tienen mucho que decir los empresarios, ya que las condiciones están dadas para crecer a tasas mayores.
Un tema que a mi parecer no ha sido atacado como corresponde es el de las pymes. Se ha hablado mucho de ellas, se han puesto en marcha varios paquetes de medidas con el objetivo de reactivarlas pero nada ha dado los resultados esperados. Mi impresión es que el diagnóstico ha fallado; está bien querer que las pymes se hagan más productivas y eficientes, que le metan TIC e innovación, pero esto sucede cuando están sanas, cuando disponen de recursos y no tienen pesadas mochilas que le impiden despegar, como les sucede a la gran mayoría con deudas previsionales, tributarias y pesados intereses bancarios. Por aquí está el problema, que se traduce en, por ejemplo, el desigual trata que reciben de la banca.
En el plano social, lo más recordado será la "revolución de los pingüinos". Las protestas estudiantiles que botaron al Ministro Zilic y que finalizaron en un Comité de estudio de reformas que en estas fechas entregó sus resultados, los que están en estudio. Aquí hay un problema demasiado grave que, lamentablemente, no veo que se solucione pronto. La educación en Chile está claramente en crisis. La PSU muestra las enormes diferencias entre los colegios particulares y los municipalizados. Gigantes, y cada vez es peor. Y que decir de la enseñanza universitaria. No puede ser que se lancen a la calle miles de jóvenes con cartones profesionales de universidades que les imparten clases una vez a la semana (los sábados en general) y obtengan títulos profesionales homologados por el Ministerio de Educación en menos tiempo que las U'es tradicionales. No puede ser. Impresentable.
Por último, para no hacer tan largos estos comentarios, en el plano internacional hay muchos hechos que marcaron el año, de los cuales quiero destacar sólo tres: el Mundial de Alemania 2006, que será más recordado por el cabezazo de Zidane que por el juego desplegado; la larga enfermedad (que a todas luces parece terminal) del eterno líder cubano Fidel Castro, y la ejecución del antiguo dictador de Irak, Saddam Hussein, ocurrida en la madrugada de hoy, en Bagdad.
Este es un breve repaso de lo más importante, a mi parecer, que ha dejado el año 2006. ¿Que opinas tú?

martes, 19 de diciembre de 2006

Tenemos dos nuevas Regiones

Desde hoy tenemos 15 Regiones en nuestro país: se han agregado las Regiones de Arica y Parinacota (en la imagen), que sale de la I Región, y la de Los Ríos, con capital Valdivia, que desaparece de la X Región.
Lo curioso es que la primera de las nombradas es la XV Región y la de Los Ríos es la XIV Región de Chile. Me surgen varias preguntas al respecto:
¿Por qué no respetar el orden geográfico y asignar el número menor a la Región del extremo norte del país? Si es por mantener los números pares e impares (para efectos electorales), viene al caso la siguiente pregunta:
¿No era más lógico darles los números XIII y XIV y en orden estrictamente geográfico, es decir, la de Arica con el numeral XIII y la sureña, con el número XIV?
Nuestra Región Metropolitana ha sido desde el inicio de la regionalización la décimotercera Región de Chile, pero no por eso tiene asignado el número XIII, que por lo visto no es considerado por nuestros legisladores.
Siempre se ha hablado de las doce regiones y del Área Metropolitana. ¿Ahora como se dirá: las catorce regiones (que tienen signados los números del I al XV ¿?) más el Área Metropolitana. Cualquiera pensaría que son dieciséis y no quince. En fin, me parece una solución no muy eficiente y que puede llevar a confusiones.
¿Y que pensaran nuestros hijos pequeños cuando les enseñen en el colegio que Chile está dividido administrativamente en 15 regiones, y que por el extremo norte partimos con la XV Región, la que limita con la I Región?
¿Cómo explicárselos?